martes, 11 de diciembre de 2007

Bwana no poder ser ya tan cuco

Los europeos llegaron a la cumbre euroafricana en Lisboa con el mensaje de siempre, pero sin la humildad suficiente para que pueda hacerse creíble.
Sin humildad porque todavía no ha habido un gesto de disculpa desde la Europa oficial por tantos años de colonialismo devastador, que todavía continúa, entre otras cosas, con un comercio desigual y aranceles que impiden la entrada en los mercados europeos, cuando entran, de productos africanos a precios asequibles.
Estaría bien empezar por ahí, por un reconocimiento de abuso de poder. Y seguir con la condena de la destrucción sistemática de toda persona y movimiento humano ideológicamente contrarios a los intereses de los reyezuelos tribales que engordan sus cuentas bancarias en Occidente gracias a esas “ayudas al desarrollo” que a veces tan irresponsablemente conceden gobiernos implícita o explícitamente cómplices de impedir que se tapone de una vez por todas la sangrante herida africana.
Hecho eso, pongamos los proyectos sobre la mesa y discutámoslos. Proyectos, no ideas, puesto que éstas ya tendrían que haber sido desarrolladas antes y durante los preparativos de la cumbre. El mensaje europeo empezaría, entonces, a ser creíble.
Europa no puede sentarse a la mesa con África para exponer que tiene un problema que espera que los africanos le ayuden a resolver, el de la inmigración, porque ése no es un problema africano, sino europeo, producto de aquellos lodos depositados sobre la fértil sabana del continente vecino.
Europa no puede sentarse a la mesa con África y plantear ayudas a la escolarización de niños que no tienen que comer en países sin producto interior bruto suficiente para mantener sistemas de educación eficientes, como tampoco puede plantear ayudas para fomentar el empleo entre los jóvenes que no quiere en Europa (salvo si están bien formados, de ahí la razón de la propuesta anterior) en países carentes de recursos económicos y diezmados por guerras y enfermedades.
Europa sí puede, en cambio, ofrecer infraestructuras, pero ahí tiene un problema (¿es esta la verdadera razón de la cumbre?) que se llama China, que ha empezado a dotar al continente de importantes infraestructuras con inversiones en refinerías, embalses, carreteras, instalaciones deportivas y educativas. Esto significa un gran negocio para las empresas chinas, cierto, pero responde a peticiones que los países africanos han expresado desde hace décadas a los gobiernos europeos, alegando que sin infraestructuras no puede desarrollarse económicamente. Mientras China gana terreno y se posiciona, Europa, que ve cómo pierde influencia, sigue en el limbo de las políticas humanitarias y de ayuda al desarrollo, necesarias, pero insuficientes, sobre todo si han bajado del 0,7% del PIB al 0,5% en el último año.
El bwana europeo ya no puede ir de cuco, de listo, con el negrito africano porque éste ya no se conforma con la espina de la perca. Quiere la chicha y los medios para cultivarla y pescarla.

Viñeta: Pinto & Chinto / La Voz de Galicia

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Vídeo documental: La pesadilla de Darwin

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Da que pensar...
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En los diez primeros meses de 2005 los intercambios comerciales entre China y África aumentaron un 39% y superaron los 32.000 millones de dólares. Las exportaciones chinas hacia el continente fueron de 15.250 millones, mientras las importaciones ascendieron a 16.920, según el gobierno chino.
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7 comentarios:

JLuis dijo...

Pues si Guillermo una cumbre vacía de contenidos y de actitudes de cambio.

Es curioso lo que comentas.

A esta Europa nuestra tan ferviente defensora de los beneficios de la libre competencia, parece se le atraganta un poco cuando viene China y plantea eso mismo: Competencia.

Un saludo

Viguetana dijo...

Interesante...
Ahora habrá que ver cómo se construyen/mantienen esas infraestructuras. Una amiga mía estuvo en el Congo el verano pasado, en una reserva de chimpancés, y vio los destrozos que las empresas chinas están haciendo ya en la masa forestal.

Pero bueno, supongo que es lo de siempre: para progresar hay que destruir. ¿O no?

Besos

Desesperada dijo...

lo mejor es ver el resumen en los medios de comunicación, cumbre histórica, etc etc.

sobre la reflexión final de viguetana... ¿cómo pedirle a los países en vías de desarrollo que no contaminen ni destruyan como hemos hecho nosotros durante siglos? difícil tesitura, aunque la razón nos asista! bicos.

Alicia Mora dijo...

Muy buen post.
Lo de la reunión esta en Europa con los Africanos me parece de rapiñas. Además que ha venido el pollo este dictador que viola continuamente los Derechos humanos y que además está prohibido su entrada en Europa.
Sinceramente, no entiendo nada,salvo el negocio y los intereses rastreros de algunos gobernantes.
Saludos

Anónimo dijo...

El gigante chino se despierta... Y entre cumbres y cumbres África sigue igual...
Tramendo.
buen blog, mira el mío, un saludo...
http://revueltaverde.wordpress.com/

Guillermo Pardo dijo...

Tengo la impresión de que el interés de China rezuma un neocolonialismo que mete miedo porque tampoco es que ellos sean muy elegantes en las formas ni en el fondo económico, social y medioambiental, pero probablemente en África estén dispuestos a pagar un precio que los europeos, pese a la ventaja, no han sabido negociar.
Gracias por vuestra visita y vuestras aportaciones.
Bienvenido/a Gaia. Te visitaré.

Fran Invernoz dijo...

Muy buen post coincido con Alicia. Hay que tener en cuenta que China es la que más ha invertido también en Latinoamérica. O sea que hay que tomar nota. Es cierto que los europeos no han sabido negociar con sus vecinos. Europa está en deuda.