sábado, 16 de enero de 2010

En el espejo de "Caminando en el desierto"

Francisco O. Campillo tiene una ventaja sobre muchos de nosotros: escribe con amor y por amor. Tiene un motivo: el Sáhara, los saharianos y su realidad en cualquiera de sus dimensiones.
Ese íntimo sentimiento se refleja en los campos semánticos de tus textos, vinculados siempre con los conceptos de que está hecha la sustancia humana. Ahí también nos gana, porque mientras muchos escribimos impulsados por el latido del día a día, Fran lo hace motivado por el tuareg que lleva dentro. Para él todo es relativo, menos la familia y el Sáhara, su otro país o su país.
"Caminando en el desierto" es el espejo en el que se proyectan sus inquietudes, pero también el diario que no pueden escribir sus hermanos de esa tierra que no ha abandonado la esperanza. Él es su brazo ejecutor, ellos su inspiración.
Por eso, y porque le da la gana, acaba de publicar un nuevo libro en el que recoge algunos de los posts que vieron la luz en su blog, espejo de la opaca realidad de un pueblo que aspira a un lugar digno en la Historia.
Le deseo éxito editorial. El del reconocimiento ya lo ha logrado.

2 comentarios:

Francisco O. Campillo dijo...

Me dejas sin palabras. Sólo encuentro una, aquella que aprendí en los campamentos de refugiados saharauis de Tinduf: SHUKRAN

Guillermo Pardo dijo...

De nada, te lo mereces. Un abrazo.