jueves, 15 de marzo de 2007

La familia viene de fuera


Es posible que la familia esté en crisis, así, en bruto, como sostienen algunos sectores sociales. Sin embargo, creo que lo que está en entredicho es el concepto de familia que conocemos desde la infancia.
La sociedad actual evoluciona tan rápidamente que no nos da tiempo de asimilar los cambios, y menos todavía en un mundo en que las distancias se han acortado de forma tan considerable. Los matrimonios se conciben hoy más como relación personal de igualdad que como unión obligada para acceder a determinados estatus, lo que en muchos casos acaba convirtiéndola en forzada y forzosa. Consecuencias: separación y divorcio, que en el caso del segundo aumentó en España un 43% en el último año, porcentaje que en Galicia desciende doce puntos.
Pero otras muchas personas viven realidades muy distintas y proceden de culturas que entienden y valoran el concepto de familia de manera diferente, y por eso, en una suerte de equilibrio natural, lo que se rompe por un lado se cohesiona por otro, e incluso se dispara, como dice el título del despiece de esta información. Podríamos afirmar, entonces, vistos los datos, que la familia en España viene de fuera.
A muchos les sonará nuevo, pero a quienes conocen de cerca la emigración saben de la importancia del reagrupamiento, del reencuentro, y del equilibrio y la estabilidad que conlleva para el mantenimiento de la identidad y del grupo familiar, sea cual sea la forma que éste tenga.
No hay más realidad palpable que la vemos con nuestros propios ojos, ni peor ciego que el que no quiere ver.

[Imagen: Familia. Fernando Botero (1996)]

No hay comentarios: