Escribe Manuel Vicent:
[...] Ya ves, no ha pasado nada. No ha caído la bomba atómica, has salido bien de una grave enfermedad, al final la crisis económica se ha superado y tus hijos son más altos y más listos. Encima el sol sale todas las mañanas y tú estás vivo. Hay que brindar.
De lo afirmado en este párrafo, probablemente en lo único en que estemos todos de acuerdo es en que el sol sale todos los días, afirmación que un previsor matizará con un "de momento" que siempre suena a mal augurio.
Los optimistas brindarán porque recientemente no ha caído, en efecto, ninguna bomba atómica, el cáncer no ha podido con ellos y la ambición de los malditos Madoff no los ha arrastrado a la cola del paro.
Los pesimistas exteriorizarán su sarcasmo preguntándose si nos hemos olvidado de Hirosima y Nagasaki, de las personas que son incapaces de superar una fiebre, de los hijos que nacen enanos y de los que crecen analfabetos funcionales, de que con el dinero regalado a los bancos se podrían haber creado millones de empleos y acabado con el hambre en el mundo.
Yo soy un optimista pesimista con espíritu socrático. Por eso no puedo estar de acuerdo con Vicent, puesto que si el hombre no hubiese evolucionado (por lo tanto ha pasado algo, y gordo) no estaríamos hablando de nada de esto.
3 comentarios:
He leído el artículo de Vicent al que haces referencia, ¿habrá pensado y contado hasta 10 antes de darlo por cerrado y enviarlo a El País?
ya lo dijo el roto: no temáis por el capitalismo, resurgirá de vuestras cenizas.
antes solía ser pesimista pero he evolucionado (por lo tanto ha pasado algo, no sé si gordo) y me he quedado en "realista"... y si bien el sol sale bastantes días (no todos) nunca sale igual para todos... lo tengo muy claro.
biquiños,
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